Quince años más tarde el misionero fue a unos cultos de evangelización donde iba a predicar un evangelista negro.
Cuando el evangelista vio al misionero, se le acercó, y le preguntó: "¿No se acuerda usted de mí?". "No", respondió el misionero, "¿Nos hemos visto antes?". "Sí, hace quince años usted me dio un Nuevo Testamento y me hizo prometer que leería cada una de sus páginas antes de usarlas para liar cigarrillos. Me llevó desde el evangelio de Mateo hasta Juan capítulo 13 antes de dejar de fumarme la Palabra y empezar a predicarla. Aquél Nuevo Testamento es la razón por la que estoy predicando aquí esta noche."
(José L. Martínez, en 503 ilustraciones escogidas
Original de:
http://www.acymaqp.org.pe/varios/maravillas-de-dios/el-africano-que-se-fumo-el-nuevo-testamento.html