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domingo, 17 de abril de 2011

El falso “amor” y el falso “compañerismo” de aquellos quienes le dicen bienvenido a las sectas falsas

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(Las falsas sectas imponen literatura
opuesta a la sana doctrina bíblica)

He visto como hoy en día la corriente diabólica del ecumenismo trata de conducir al mundo a la falsa “unidad”. Se trata de mezclar lo profano con lo sagrado. Una falsa unidad de gente que no sigue la sana doctrina y aquellos quienes piensan tener la sana doctrina. Tratan de lograr una mezcla, del apóstata con el creyente, del incrédulo con el creyente, de los cabritos con las ovejas. Para lograr esta falsa “unidad” tratan de hacer creer que se trata de practicar el amor al prójimo. Ahora le llaman “amor” a la convivencia de la mentira con la verdad, de la luz con las tinieblas, de lo profano con lo sagrado. Por medio de sutilezas y de apariencia de piedad van conduciendo a millares a la perdición. No siguen no predican la buena leche espiritual sino que sirven la dañada leche espiritual adulterada. Jesucristo vino para traer un evangelio santo. Un evangelio donde conocemos todo lo que Dios es por medio de la persona de Cristo quien es todo Dios y quien nos revela al Padre en su misma persona. La verdadera doctrina cristiana reconoce que Jesucristo es la plenitud de la deidad, que hay un solo camino que nos lleva al Padre el cual es Jesucristo. Es Jesucristo el objeto de nuestra adoración junto con el Padre. Que Jesucristo siendo igual al Padre en deidad vino y se encarnó para redimir al hombre. Que ese Dios murió y resucitó y nos lavó con su sangre. Cualquiera que niegue esto no tiene a Dios.


En este tiempo de engaño son muchos los que van por las casas llevando perdición y mortandad. Llevan doctrinas erradas que niegan a Jesucristo. Ante este panorama tenemos la advertencia de Dios que nos invita a andar en la verdad.


Con esto, hay que dejar claro que de lo que hablamos es en cuanto a la doctrina de la verdad. No me refiero al servicio al prójimo. Cuando hablamos del servicio y amor al prójimo este debe ser sin acepción de personas. Si usted ve a su enemigo que tiene sed, déle de beber, si tiene hambre, déle de comer, si necesita ayuda, ayúdelo. Esto nada tiene que ver con el tema de las doctrinas. Lo que sucede es que hoy, están tratando de impulsar el ECUMENISMO, por medio del tema del amor. El amor verdadero, no permite que cohabiten la mentira y la verdad. El amor del que habla la Biblia, reprende lo errado y llama a lo torcido para que se enderece.


Vea los siguientes temas:


Jesucristo, la salvación y la sana doctrina ("Mi pueblo perece" -dice el Señor)


Un sólo Dios en los cielos, una sola morada en deidad


"Mamá, los Testigos de Jehová están a la puerta". -"¿Qué les digo...?"



"Amor es proteger al amado de todo lo malo que podría sobrecogerlo. Amor es señalarle a la amada a dónde están los peligros. Amor es defender al amado de todo aquello que quiere hacerle daño. Amor es resistir a todo aquello que pudiera perjudicar al amado..., etc. Un amor falso, que da lugar a lo que destruye a la iglesia y no lo condena, no es el “amor” del que habla la Biblia". -www.Logoi.org

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