Nota:
No somos llamados a juzgar, SIN EMBARGO, somos llamados a PROBAR LOS ESPIRITUS, para ver si son de Dios o no. Dentro de ese mandato bíblico tenemos que medir por la Palabra si lo que se dice está dentro del marco bíblico o es pura herejía y engaño. No se deje impresionar por las apariencias, tenemos suficientes advertencias en la Biblia que dejan claro las maquinaciones del enemigo en el último tiempo, incluyendo esas que dicen que el enemigo y sus ministros se disfrazan como "ministros de justicia" y también que en el último tiempo serían capaces de engañar si fuese posible aun a los escogidos. Ya algunos han llevado la voz de alerta en torno a Dante Gebel, vea el video: www (punto) youtube (punto) com/watch?v=8HDoGYoXb5w Y es que en este último tiempo hay que tener mucho cuidado, pues no todo lo que brilla es oro. Por otro lado, tenemos a un Joel Osteen quien afirmó que no mencionará la palabra "pecado" en su iglesia. ¿Es esto cierto o falso? Si esto es cierto, Osteen NO PREDICA EL EVANGELIO DE CRISTO SINO OTRO EVANGELIO, UN EVANGELIO FALSO. Dice la Biblia: "Por sus frutos los conoceréis", y parte de esos frutos lo son cada una de las palabras que sale de sus bocas... En este último tiempo, estamos conscientes que el Vaticano ha introducido a diversidad de personajes dentro del mundo cristiano para dirigir a los protestantes a abrazar el ecumenismo y dirigirlos al Nuevo Orden Mundial. Primero tienen que cambiar la doctrina cristiana para que los cristianos sigan las pamplinas y herejías de sus falsos líderes. Así, de forma disfrazada y con sutilezas, están logrando que los cristianos dejen la doctrina de Dios para ir en pos de bufonadas. En este tiempo, ya algunos han dejado de creer en el Rapto (Arrebatamiento) de la iglesia para ir en pos de sus "conquistas" terrenales. De la misma forma, Paul Yongui Cho ha logrado introducir toda clase de técnicas budistas y de la Nueva Era y las justifica con la Biblia para promover una "nueva fe", muy diferente a la fe del sano evangelio. La fe que promueven estos "nuevos ministros modernos" es visualización oriental, sugestiones de la mente, poder de la mente, y cosas semejantes a estas, que lo que buscan es elevar al hombre a usurpar el lugar que le corresponde a Dios. En la Biblia, el hombre clama, ruega, suplica y se humilla delante de Dios y es Dios quien declara y decreta a favor de los hombres. En cambio, hoy, estos magnates del evangelio de la prosperidad proponen un evangelio donde es el hombre quien decreta y ordena a pedir de boca y presentan a un Dios sujeto a sus designios y no a un Dios soberano como está en la Biblia. El evangelio de la Biblia, nunca tuvo por objetivo que los cristianos crearan un mundo ideal por medio de la visualización oriental ni técnicas similares a las de los budistas. Los monjes budistas realizan toda clase de milagros por medio del poder de la mente, en cambio esos milagros no provienen de Dios. ¿De quién provienen esos milagros de aquellos cristianos que usan las mismas técnicas de los budistas? Tenemos una advertencia en la Biblia que nos dice que muchos harán reclamos a Cristo sobre los muchos milagros y señales que hicieron en la tierra utilizando el nombre de Jesús, en cambio, Cristo afirma que les dirá: "Nunca os conocí", lo demás ustedes lo saben. Tengamos cuidado y no estemos cayendo en las redes del ecumenismo, la Nueva Era, la visualización, la falsa prosperidad, y estemos cambiando la doctrina cristiana por estratagemas de hombres.
