
Recuerda la historia de Job, de como paso por situaciones muy adversas. Siendo muy rico y teniendo de todo, fue perdiéndolas una a una. Sus hijos, sus bienes, su salud, todo desapareció de repente. Luego, los que parecían eran sus amigos, a lo que se dedicaban era a culparlo por lo que creían eran las razones de su situación. En medio de todo, Job confió que aun desde el polvo de la tierra Dios lo levantaría y así fue. Siempre supo que sus lágrimas Dios las secaría, aunque en el proceso se tardara. Así confía y que tu fe sea victoriosa. Siempre ora y lee la Biblia para que estés cerca de Dios.